Resumen de El Vampiro Estelar de Robert Bloch - Parte I

Resumen de El Vampiro Estelar

Parte I

Robert Bloch


El narrador es un apasionado por el horror, desde temprana edad insociable y con tendencias a la depresión, quien navegó por las sendas del misterio de la mano de Poe, Blackwood, y Machen. Un hombre necesita trabajar para vivir, así que compró una máquina de escribir para vomitar ficción en sus hojas, pues se decidió a ser escritor, y aunque en un principio no lo hacía bien y todos sus primeros relatos fueron rechazados por las revistas especializadas, con el tiempo por medio de dedicación y esmero fue mejorado y puliéndose hasta llegar a un nivel de prosa profesional, hasta que al fin sus relatos comenzaron a ser aceptados y publicados, sin embargo pese a que ya dominaba el arte de la escritura y tenía la motivación para crear, consideraba dentro de sí que los temas que trataba en sus obras eran redundantes con temáticas desde ghoules a licántropos, y él quería plasmar el verdadero horror, sumergirse en lo desconocido y plasmar en papel los misterios del abismo y El Otro Lado, razón por la cual inició una campaña para conocer sobre cosas insólitas.


Entró en contacto entonces por correspondencia con un ocultista de Providence quien también era escritor y de distinguida fama, quien le indicó los pasos a seguir para adentrarse en el mundo del misterio, comenzando en consecuencia a visitar universidades, bibliotecas, y a enviar cartas con intención de adquirir información de ocultistas y sectas, conociendo de ese modo todo un submundo de personas discretas dedicadas a asuntos discretos. En bibliotecas y universidades, no encontró nada importante, pero de ocultistas y sectas sí recibió respuestas, aunque no las que esperaba recibir.


¡Amenazas!… por correo, junto a una intimidante llamada telefónica anónima cuyo mensaje sería mejor olvidar, fue lo que recibió. Que terrible, ser amenazado por quienes se dedican a maldecir e invocar demonios, es una situación verdaderamente desafortunada, comprendiendo de ese infortunado modo, que quienes conocen los secretos del abismo, celosos son con este y no lo desean compartir, menos con un don nadie como él. Sin embargo en paralelo, por medio de su mentor de Providence, comenzó también a conocer sobre la existencia de grimorios como el “Libro de Eibon”, el “Necronomicón”, y el terrible “Cultes Des Goules” del conde D’Erlette.


Y sucedió un día que recorriendo unas librerías de South Dearborn, entró en una vieja tienda para ver qué había, donde en una estantería arrinconada encontró un misterioso libro negro y con tapas de hierro titulado, “De Vermis Mysteriis”, cuya traducción al castellano sería, “Misterios del Gusano”. Supuso que era un gran hallazgo, pero al ojearlo, ¡Maldición!, estaba escrito en latín. Sin dudas su contenido debía ser mistérico, pero él no hablaba en latín. Lo compró a un precio ridículamente bajo, y al consultar referencias con el librero, este le dijo que desconocía la procedencia del libro y la naturaleza de su contenido.


Y ya con el libro en su poder, le informó de la adquisición a su mentor, quien al responderle lo invitó a Providence para que estudiaran el libro en conjunto, ya que él como buen ocultista hablaba latín de forma fluida. Pero antes de viajar a Rhode Island, buscó el narrador información sobre el libro en base a su título para no llegar con las manos vacías. Y lo que consiguió averiguar, fue…


- Lo escribió un brujo llamado Ludwing Prinn quien sirvió en la novena cruzada como caballero de la Orden de Montserrat.
- Fue hecho prisionero por los musulmanes, y de sus captores conoció los mitos sobre los “djinns”.
- Al ser liberado recorrió Oriente Medio y Egipto donde conoció la nigromancia y la alquimia.
- Como nigromante se dedicaba a la invocación y como alquimista a buscar la Piedra Filosofal, y además adquirió el secreto de la vida eterna.
- Se trasladó a Bruselas, en Bélgica, donde en un bosque se dedicó a invocar seres de las estrellas, y se decía que tenía sirvientes invisibles que los controlaba como si fueran sus esclavos.
- La Inquisición lo arrestó siglos después, lo sometieron a cruel tortura por brujería, y al escuchar quién afirmaba ser, no le creyeron, ya que las personas no viven siglos, así que asumieron que era un loco, o un descendiente de aquel caballero que sirvió en la novena cruzada.
- Estando prisionero de la Inquisición, de un incomprensible modo debido a las circunstancias en que se encontraba, escribió De Vermis Mysteriis, donde plasmó todos los conocimientos que adquirió durante siglos de estudio.
- Murió quemado en la hoguera acusado de ser un servidor del demonio.
- Pero su De Vermis Mysteriis sobrevivió a la Inquisición, y un año después de su muerte fue impreso en Colonia, Alemania, en 1543.


Con esa información viajó a Providence el narrador, donde junto a su anfitrión intentaría conocer los secretos del De Vermis Mysteriis de Ludwing Prinn…




Resumen de Alberto Salgado.

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